Importantes antecedentes reveló la Séptima Encuesta Nacional del Instituto Nacional de la Juventud (Injuv), aplicada a más de ocho mil personas con edades entre los 15 y los 29 años, residentes en todas las regiones y pertenecientes a todos los niveles socioeconómicos del país.

Una de las revelaciones de este estudio se dio en el capítulo dedicado a la felicidad, cuyo resultado reveló que el 84% de los jóvenes son felices a nivel país, lo que da cuenta de un incremento de 12 puntos respecto a  2009.

En el desglose por región, la encuesta mostró que con un 89,9% de percepciones positivas los jóvenes que viven en Magallanes son los más felices del país, seguidos por los de la Región Metropolitana (86.4%), Valparaíso (86.8%) y Antofagasta (87.1%).

Según el Injuv, uno de los factores que incide directamente en el grado de felicidad percibido por los jóvenes es la ubicación geográfica, dado que en términos generales la encuesta revela que quienes viven en zonas urbanas muestran un 84% de felicidad, mientras que los que viven en zonas rurales son menos felices, con un 78%.

Otros factores que son mencionados por este segmento cuando da cuenta de su percepción de felicidad son el tener un trabajo o profesión de su agrado (32,1%), junto al construir una buena familia y relación de pareja (27,2%). En el caso de Magallanes el primer elemento arrojó un  36%  y el segundo un 24% de menciones.

En cuanto al resto de las preguntas relacionadas con qué es lo más importante para ser feliz, en la región el factor “desarrollarse como persona” tuvo un 13 % de respuestas, mientras que sólo un 9% de los magallánicos entrevistados señaló a los ingresos económicos como un factor de felicidad.

A su vez, factores como tener buenos amigos y salud obtuvieron un 10% y 9%, respectivamente.

Siempre en el plano local, la directora regional del Injuv, Carolina Vásquez, dijo que “esto nos demuestra que la percepción de los jóvenes es positiva y enérgica en relación a su región y nos manifiesta ánimo y fuerza para superar los obstáculos”, aseguró.